“Por
la señal + de la Santa Cruz, de nuestros + enemigos, líbranos Señor + Dios
Nuestro. En el Nombre + del Padre y del Hijo y
del
Espíritu Santo. Amén”.
Nos ponemos en
presencia de Dios y para que la oración llegue al Cielo, pedimos humildemente
perdón al Señor por nuestras faltas (silencio…) y decimos:
“Pésame, Dios
mío, y me arrepiento de todo corazón por haberos ofendido – Pésame por el
infierno que merecí y por el cielo que perdí – pero mucho más me pesa – porque
pecando ofendí a un Dios tan bueno – y tan grande como Vos. – Antes querría
haber muerto que haberos ofendido, y propongo firmemente no pecar más – y
evitar todas las ocasiones próximas de pecado. Amén”.
ORACIÓN PREPARATORIA PARA TODOS LOS DÍAS
Dios y Señor mío, dignaos aceptar esta Novena que hago
Dios y Señor mío, dignaos aceptar esta Novena que hago
al Corazón de María, vuestra celestial Madre;
y Vos, Virgen Santa, alcanzadme la gracia necesaria. Amén.
DÍA QUINTO
Corazón Inmaculado de María,
Virgen purísima y sin mancha, alcanzadnos la gracia de pasar por este mundo tan
lleno de pecados, de manera que nos conservemos puros del lodo de tanta sensualidad.
Amén.
Cinco avemarías
DEPRECACIONES
Oh
Corazón de María, compadeceos de los incrédulos; despertad a los indiferentes;
dad la mano a los desesperados; convertid a los blasfemos y profanadores de los
días del Señor. Avemaría.
Oh
Corazón de María, aumentad la fe de los pueblos; fomentad la piedad; sostened
las familias verdaderamente católicas; apagad los odios y venganzas en que se
abrasa el mundo. Avemaría.
Oh
Corazón de María, salvad a los mundanos, purificad a los deshonestos, volved al
buen camino a tantas víctimas del vicio
y del
error. Avemaría.
Oh
Corazón de María, convertid a todos los pecadores de la Iglesia; dirigid a
patronos y obreros; iluminad con luz celestial a los malos escritores y
gobernantes; santificad a los malos católicos. Avemaría.
Oh Corazón
de María, suscitad muchos y Santos Sacerdotes y Misioneros que trabajen en la
conversión de los pecadores y en la salvación de las almas de todo el mundo, y
dadnos a todos la perseverancia final en el santo amor y temor de Dios. Así sea.
Avemaría.
ORACIÓN FINAL
Oh Inmaculado Corazón de María, en Vos confiamos;
no nos dejáis en este valle de lágrimas hasta vernos seguros
junto a Vos en el cielo. Así sea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario