COMO
REZAR EL SANTO ROSARIO LEGIONARIO
Para recitar el Rosario con verdadero provecho se
debe estar en estado de gracia o por lo menos tener la firme resolución de
renunciar al pecado.
ORACIONES INICIALES
Ven, Espíritu Santo, llena los
corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.
V. Envía, Señor, tu Espíritu y todo será creado.
R. Y renovarás la faz de la tierra.
V. Envía, Señor, tu Espíritu y todo será creado.
R. Y renovarás la faz de la tierra.
OREMOS
Oh Dios, Padre nuestro, derrama los dones de tu Espíritu sobre el mundo: enviaste al Espíritu a tu Iglesia para iniciar la enseñanza del Evangelio; que sea ahora tu Espíritu el que continúe trabajando en el mundo a través de los corazones de todos los que creen en Ti. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
V. Señor, ábreme los labios.
R. Y mi boca proclamará tus alabanzas.
V. Oh Dios, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
R. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos, Amén.
Se reza el Santo Rosario (cinco decenas) y la Salve
- LUEGO DECIMOS EL MISTERIO:
EL PRIMER MISTERIO ES LA ANUNCIACIÓN DEL ÁNGEL A LA
VIRGEN MARÍA Y LA ENCARNACIÓN DEL HIJO DE DIOS: El Arcángel Gabriel se
presenta ante la Virgen María y le anuncia que será la Madre de Jesús. “María dijo entonces: Yo
soy la servidora del Señor, que se cumpla en Mí lo que has dicho”. (Lc. 1, 38)
Por este misterio pedimos a la Santísima
Virgen aprender a ser humildes y obedientes a la Palabra de Dios.
- EN LA PRIMERA CUENTA GRANDE RECITAR UN PADRE NUESTRO
PADRENUESTRO:
“Padre
nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre – venga a nosotros tu
Reino – hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan
de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los
que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén”.
EN CADA UNA DE LAS DIEZ
SIGUIENTES CUENTAS PEQUEÑAS
(UNA DECENA) RECITAR UN AVE MARÍA
MIENTRAS SE REFLEXIONA EN EL
MISTERIO;
10 AVEMARÍAS:
“Dios
te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo, bendita Tú eres
entre todas las mujeres, - y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. – Santa
María, Madre de Dios, - ruega por nosotros pecadores – ahora y en la hora de
nuestra muerte. Amén”.
LUEGO, RECITAR UN GLORIA
1 GLORIA:
“Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo
– como era en un principio, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos.
Amén”.
- ANUNCIAR EL SEGUNDO MISTERIO DEL ROSARIO
EL SEGUNDO MISTERIO ES LA VISITA DE MARÍA SANTÍSIMA
A SU PRIMA SANTA ISABEL: “En
aquellos días, María partió y fue sin demora a un pueblo de la montaña de
Judá”. (Lc. 1, 39), a ver a su prima Isabel.
Imitemos a la Virgen María y aprendamos a sacrificarnos con alegría, en bien de nuestro prójimo. Pidamos la verdadera caridad cristiana
.
- En cada una de las siguientes décadas recitar las oraciones de la misma manera: recitar el Padre Nuestro, diez Ave Marías mientras se medita en el misterio, y termina con el Gloria
- ANUNCIAR EL TERCER MISTERIO DEL ROSARIO
EL TERCER MISTERIO ES EL NACIMIENTO DE NUESTRO
SEÑOR JESUCRISTO EN EL PORTAL DE BELÉN: “Mientras se encontraban en
Belén, le llegó el tiempo de ser madre; y María dio a luz a su hijo
primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre”. (Lc. 2, 6-7)
Pidamos a la Santísima Virgen, el
desprendimiento de todo lo terreno.
- En cada una de las siguientes décadas recitar las oraciones de la misma manera: recitar el Padre Nuestro, diez Ave Marías mientras se medita en el misterio y terminamos con el Gloria.
- ANUNCIAR EL CUARTO MISTERIO DEL ROSARIO
EN EL CUARTO MISTERIO CONTEMPLAMOS LA PRESENTACIÓN
DEL NIÑO JESÚS EN EL TEMPLO: “Cuando
llegó el día fijado por la Ley de Moisés para la purificación, llevaron al Niño
a Jerusalén, para presentarlo al Señor”.
(Lc. 2, 22)
Pidamos a la
Santísima Virgen la virtud de la obediencia.
.
- En cada una de las siguientes décadas recitar las oraciones de la misma manera: recitar el Padre Nuestro, diez Ave Marías mientras se medita en el misterio y concluir con el Gloria.
- ANUNCIAR EL QUINTO MISTERIO DEL ROSARIO
EN ÉSTE QUINTO MISTERIO CONTEMPLAMOS EL NIÑO JESÚS, PERDIDO Y HALLADO EN EL TEMPLO:
Jesús se ha
perdido. Tiene doce años. Acongojada y afanosamente la Virgen lo busca con resignación.
“Al
tercer día, lo hallaron en el Templo en medio de los doctores de la Ley”. (Lc. 2, 46)
Pidamos a María gran resignación cristiana
ante la voluntad de Dios.
- En cada una de las siguientes décadas recitar las oraciones de la misma manera: recitar el Padre Nuestro, diez Ave Marías mientras se medita en el misterio, concluir con el Gloria .
11. Cuando se ha concluido el
quinto misterio el Rosario suele terminarse con el rezo de la Salve
LA SALVE
Dios te salve, Reina y Madre, Madre de Misericordia, Vida y dulzura y esperanza nuestra. Dios te salve, a ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A Ti suplicamos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra. Vuelve a nosotros esos Tus ojos misericordiosos, y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de Tu vientre. ¡Oh clemente! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce Virgen María!
L. Ruega por nosotros, santa Madre
de Dios
R. para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén."
R. para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén."
OREMOS
Oh Dios, cuyo Hijo Unigénito, nos obtuvo la salvación eterna por medio de su vida, muerte y resurrección; concédenos a quienes meditamos estos misterios en el rosario de la bienaventurada Virgen María, imitar lo que enseñan y alcanzar lo que prometen. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
V. Sacratísimo Corazón de Jesús,
R. Ten piedad de nosotros.
V. Inmaculado Corazón de María,
R. Ruega por nosotros.
V. San José,
R. Ruega por nosotros.
V. San Juan Evangelista,
R. Ruega por nosotros.
V. San Luis María de Montfort,
R. Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre, etc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario