ES EL DÍA EN
QUE CRISTO INSTITUYÓ EL SACRAMENTO DE LA EUCARISTÍA, TAMBIÉN CONOCIDO COMO LA
ÚLTIMA CENA y EL SACERDOCIO.
QUÉ CELEBRAMOS EL JUEVES SANTO?
1. La Última Cena,
2. El Lavatorio de los pies,
3. La institución de la Eucaristía y
del Sacerdocio
4. La oración de Jesús en el Huerto
de Getsemaní.
QUÉ HACEMOS ÉSTE DIA?
MISA CRISMAL
Este día
por la mañana en todas las catedrales, los obispos que son, como dice el
Concilio, "los principales administradores de los misterios de Dios, que
regulan, promueven y custodian toda la vida litúrgica de la Iglesia que les ha
sido confiada", celebran una misa muy solemne con todos los Sacerdotes
("el Presbiterio" de sus Diócesis) y en ella los Sacerdotes con un
solo corazón y una sola alma renuevan sus promesas y su obediencia al Obispo.
En ella,
además, se consagran los óleos, es decir, los aceites que se emplean en
diversos Sacramentos: el Bautismo, la Confirmación, el Orden Sacerdotal y la Unción
de los Enfermos.
La
consagración de los óleos se celebra precisamente este día para indicar que
todos los sacramentos nos relacionan con el Misterio Pascual de Jesús y que
todos los sacramentos tienen su culmen y su Centro en la Eucaristía.
QUÉ SIGNIFICADO TIENE ÉSTA CELEBRACIÓN?
INSTITUCIÓN DE LA EUCARISTÍA
“Porque yo he recibido una tradición, que procede del
Señor y que a mi vez os he transmitido: que el Señor Jesús, en la noche en que
iban a entregarlo, tomó pan y, pronunciando la Acción de Gracias, lo partió y
dijo: "Esto es mi cuerpo, que se
entrega por vosotros.
Haced esto en memoria
mía".
Lo mismo hizo con el cáliz, después de cenar, diciendo:
"Este cáliz es la nueva alianza sellada
con mi sangre;
haced esto cada vez
que lo bebáis, en memoria mía".
Por eso, cada vez que coméis de este pan y bebéis del
cáliz, proclamáis la muerte del Señor, hasta que vuelva.”
(1 Cor 11,23-26)
La Eucaristía es tradición recibida. No se
trata de una celebración individual donde cada uno hace lo que quiere, sino de
una tradición recibida del Señor a través de la Iglesia. Este camino de la
tradición del Señor a través de las generaciones cristianas es el que hace
posible la renovación de la Cena y la Pasión del Señor en todos los momentos de
la historia.
La
acción litúrgica realiza verdaderamente la salvación. El pasado (la cruz del
Señor) se hace accesible en el presente (la vida de la Iglesia) por medio de la
celebración.
EL LAVATORIO DE PIES
“Cuando acabó de
lavarles los pies, tomó el manto, se lo puso otra vez y les dijo: ¿Comprendéis
lo que he hecho con vosotros? Vosotros me llamáis "el Maestro" y
"el Señor", y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Maestro y el
Señor, os he lavado los pies, también vosotros debéis lavaros los pies unos a
otros: os he dado ejemplo para que lo que yo he hecho con vosotros, vosotros
también lo hagáis.” (Jn 13,12-15)
En la
Misa vespertina, antes del ofertorio, el Sacerdote celebrante toma una toalla y
una bandeja con agua y lava los pies de doce feligreses, recordando el mismo
gesto de Jesús con sus Apóstoles en la Última Cena.
El LAVATORIO DE LOS
PIES, acción humillante y propia de esclavos, es el símbolo de la persona de
Jesús y su actuación, de su entrega radical que incluye la Eucaristía. Cristo
es el Sacramento primordial y la Eucaristía es la revelación de Cristo y de su
amor a los suyos hasta el extremo, así como la respuesta de éstos en la fe y en
la caridad.
Son
muchos los gestos que se evocan en el Jueves Santo.
Uno de
ellos es el signo de humildad y sencillez que realizó Jesús al lavarle los pies
a todos sus discípulos, diciéndoles que ellos se los deben lavar unos a otros, "en
verdad les digo que el siervo no es más que su señor, ni el enviado más que
quien lo envió" (San Juan 13, 16.
Al concluir la
celebración de la MISA DE JUEVES SANTO, «In
Coena Domini», en la que celebramos la institución de la Sagrada Eucaristía
y el Sacerdocio — el tabernáculo queda
vacío en memoria de la muerte de Jesús y se hace entonces la reserva del
Santísimo Sacramento en un lugar especial, tradicionalmente denominado
«Monumento».
EL TRASLADO DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO AL MONUMENTO
La ceremonia del
traslado del Santísimo Sacramento al Monumento tuvo su origen cuando, en
tiempos pasados, se comenzó a guardar o reservar en un lugar aparte las Sagradas
Formas que fueran necesarias para administrar la Eucaristía a los fieles que,
por motivos de salud o de piedad, deseaban comulgar en Viernes Santo.
Con los años la traslación
adquirió un carácter solemne, realizándose de modo procesional. En su recorrido
se acostumbra cantar el Tantum Ergo, célebre himno compuesto por Santo Tomás de
Aquino, así como por otros cánticos eucarísticos.
Llegados al pie del
Monumento —un altar o capilla previamente acondicionado para acoger al Pan del
Cielo— en medio de las plegarias y del incienso, los fieles se van turnando
unos a otros en un acto de adoración continua a Jesús Sacramentado.
Luego se
expone el Santísimo (Ostia Consagrada) y se realizan vigilias de oración en
signo de la oración de Jesús en el Monte de los Olivos, la noche antes de ser
entregado a los sacerdotes.
LA NOCHE EN EL HUERTO DE LOS OLIVOS
La Biblia
cuenta que terminada la Cena de Pascua, el Mesías y sus Apóstoles se dirigieron
al Monte de los Olivos a orar. Él se distanció un poco, rezaba y sudaba cada
vez más fuerte, comenzó a sentirse angustiado porque sabía lo que venía, y un
ángel del cielo lo reconfortó.
Cuando
fue a buscar a sus amigos se dio cuenta de que estos se habían quedado
dormidos, Él les dijo, "ha llegado la hora en que el Hijo de
Dios debe ser entregado. Levántense, ya se acerca el que me va entregar".
La Iglesia pide dedicar un momento de adoración y de agradecimiento a Jesús, un acompañar a Jesús en la oración del huerto. Es por esta razón que las Iglesias preparan sus monumentos.
Reflexionemos
con Jesús en lo que sentía en estos momentos:
su miedo,
la angustia ante la muerte, la tristeza por ser traicionado, su soledad, su
compromiso por cumplir la voluntad de Dios, su obediencia a Dios Padre y su
confianza en Él.
Las virtudes que nos enseña Jesús
este día, entre otras, son la obediencia, la generosidad y la humildad.
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